A continuación vamos a describir un proceso de rolado de grano de maíz. En una planta de proceso de rolado, la primer área es la de recepción de grano, ya sea mediante camión con una báscula para camiones, un foso de recepción con su rejilla para soportar el camión y un volcador hidráulico para elevarlo y recibir la materia prima, o por ferrocarril, donde se incluye una báscula para ferrocarril y el foso de captación de grano.

Debemos iniciar el proceso con un cuidado del grano a rolar, para esto es necesario instalar una prelimpieza antes del inicio del proceso, con la finalidad  de apoyar la conservación y un mejor manejo del grano, quitando las impurezas en finos y gruesos que puedan venir desde el mismo campo o cosecha. Esta dependerá en gran parte de los mercados locales e internacionales que el cliente maneje.

El diseño y selección de los equipos que almacenen y muevan el grano dependerá fundamentalmente de la capacidad de almacenamiento y procesamiento de producto terminado diario que el cliente requiera. Es decir, las velocidades de las mecanizaciones que van a mover el grano hacia el almacenamiento, hacia el proceso y de entrega de producto terminado se define bajo las premisas de producción requeridas en la planta. Así mismo, la capacidad de almacenamiento es crítico para tener una planta funcionando en la capacidad que su rendimiento y eficiencia sea el más alto y adecuado.

La decisión de qué cantidad de almacenaje tener para iniciar con un buen proceso de rolado de granos te lo debe dictar el mercado al que debemos participar o en cuál se esa compitiendo, por ejemplo una planta de rolado para bajas producciones sus costos de producción son altísimos ya que por lo general estarán recibiendo camiones a como vayan necesitando la producción de lo contrario buscar un equilibrio a gran escala como para descargar trenes unitarios o medios trenes esto hace que la planta comience con índices de productividad mejores a arrancarla por cantidades menores , los fletes son más baratos , la capacidad de los silos en relación a costo por tonelada de inversión se va a la baja y por ende el costo de producción es muy competitivo para poder ofrecer precios  finales de grano rolado a un buen precio en mercados con áreas de oportunidad o competitivos. Los silos de 7,000 y 12,500 tons son excelentes medidas para este negocio ya que puedes almacenar en ellos medios o carruseles completos de grano de maíz para dar inicio a estas economías de escala que platicamos en párrafos anteriores.

La segunda área es el almacenamiento donde se pretenderá guardar el grano en buen estado, libre de plagas, y con la aireación requerida para su buen conservamiento. El tener un buen servicio de pre limpia nos lleva a disminuir las zonas de calentamiento de grano y evitar plagas a través de una fumigación del mismo uniforme y eficaz, esto se debe a que pueden correr los fungicidas a través de las columnas de aire una vez que el grano está libre impurezas que no permitan el paso correcto del sistema de fumigación. El diseño de esta área de igual forma dependerá del proceso de compras de materia prima y la capacidad de proceso para venta de producto terminado.

Para el almacenamiento, normalmente se utilizan silos para granos cilíndricos, los cuales son de acero galvanizado para cuidar la composición del grano. En Meprosa nos especializamos en proyectos llave en mano, donde somos representantes de la marca Chief en silos para diferentes capacidades que pueden ir desde las 20 tons hasta las 35,000 tons de almacenamiento. Así mismo, otra opción también es almacenar los granos o materia prima en bodegas planas con las mismas mecanizaciones. En algunos casos, como lo son las harinas y pastas, es más conveniente almacenar el producto en bodegas que en silos, ya que el diseño de los silos está más enfocado a producto a granel, sin embargo, existe la flexibilidad tanto de los silos, como de las bodegas para almacenar ambos tipos. Hay diversas teorías sobre almacenar en silos o bodegas, cualquiera de las dos formas son prácticas comunes en México y el mundo , sin embargo con el paso de los años y la evolución de los sistemas de almacenamiento se ha llegado a las conclusiones que es más rentable y eficiente almacenar y cuidar el grano en silos metálicos con sistemas de aireación probados que en bodegas abiertas que sistemas no tan herméticos y muchos m2 de construcción que pudieran almacenar mayor cantidad de toneladas instaladas con la construcción de silos metálicos cilíndricos, sobre todo en lugares donde la tierra es cara y escasa.

La siguiente etapa es la limpieza de granos, en la cual en ésta área es donde se diseñan e instalan los equipos necesarios que permitan la limpieza de la materia prima, la recolección de impurezas y objetos, previo al proceso. En este punto, se extraen de la materia prima los gruesos y los finos que vengan con el producto desde los silos de almacenamiento, con la finalidad de proteger de rupturas y atascamiento la línea de proceso. Así como de mejorar la calidad de producto terminado, y lograr la mayor eficiencia en el sistema de rolado. En este etapa, los equipos que generalmente se instalan pueden ser la cribadora de tipo diamante, para la limpieza inicial, una un equipo de cribado tipo rotatorio o de tipo mesa para la limpieza y selección de los granos a pasar al proceso. Adicionalmente, se pueden instalar tambores magnéticos para atrapar cualquier partícula ferrosa pequeña que pueda pasar por el sistema de cribado. El cribado de granos tienes como finalidad poder hacer uso de casi el 100% del grano que llega al almacenamiento, el separar las calidades y tamaños de los granos beneficia el uso del rolado pero también abre un negocio de venta de grano forrajero que un sistema de cribado permite recuperar esas impurezas o grano quebrado o mitades para venderlo como un grano apto para el ganado en mercados secundarios que existen dentro de la agro industria nacional e internacional y con esto apoyar una mejor calidad nutrimental en las carnes o leches que consumimos día a día en nuestra dieta alimenticia.

La siguiente fase del proceso es el área de humectación de ganos, donde se diseña la adición de agua (humedad) al grano para almacenarlo un periodo de tiempo necesario para después alimentar al proceso. Este se puede lograr mediante la adición de solo agua, y/o añadiendo químicos que ayudan a que el tiempo de humectación se reduzca. La humectación generalmente se hace en un helicoidal de alabes especiales que permiten la buena adición y homogenización de la humedad. La intensión en este proceso es meramente humectar el grano y homogenizarlo en el volumen total para lograr una producción estable y continua. En resumen al lograr un buena homogenización el sistema tendrá sus mejores rendimientos para lo cual fue diseñado.

Después de la correcta humectación y homogenización del grano, el grano es llevado a una cámara donde se le inyecta vapor, que es conocida como el cocedor de granos, en donde la presión de vapor inyectada al sistema debe ser la óptima para que busque una temperatura de salida del grano que vaya de los 88 a los 100 grados centígrados aproximadamente con un tiempo de retención que va de los 40 a los 50 minutos. El objetivo que porcentaje de humedad que se busca en el grano es elevarlo de  14% que se tiene al estar almacenado a un 22% después de pasar por el cocedor de grano. Al realizar esta tarea, la eficiencia del equipo de rolado se incrementa, debido a que es más facil rolar el grano con mayor humedad, resultando en una calidad del producto superior. Si el grano logra tener una humectación como se dicta la norma el proceso de rolar o rodillos trabajaran de una mejor manera y de un modo más gentil que moler o rolar una materia prima seca que pueda poner en riesgo el proceso o la calidad del mismo.

La siguiente parte del proceso es el rolado del grano, donde se recibe el grano con humedad y temperatura adicional del cocedor y entra a la operación del rolado, donde se alimenta con esta materia prima en donde es aplanado entre dos rodillos corrugados lo que resulta en una hojuela delgada o fina, llamada flake. En este proceso se origina que la densidad del producto se reduzca a un 40 a 45% de la densidad original del grano entero. El proceso de rolado de granos es necesario, ya que al aplastar el grano y darle la forma plana, como hojuela, le facilita al animal, en muchos casos ganado vacuno y porcino, el procesamiento del mismo, generando que no gaste tanta energía en alimentarse y pueda ganar peso más rápido, a esto se le llama tasa de conversión , es decir, por cuantos kilos de alimento que le damos al ganado cuantos kilos de peso el ganado va ganando y en qué periodo de tiempo lo logra. A menor tiempo de engorda, menor uso de comida y mayor tasa de producción arrojando economías o ganancias de escala en relación con los métodos tradicionales de alimentación de ganado.

Una vez sale el grano de la roladora de granos, es necesario bajar la temperatura y disminuir la humedad del producto caliente, en este caso la hojuela, para su posterior almacenamiento. Generalmente, se utilizan enfriadores de contraflujo, siendo estos los más usados, donde básicamente es el paso del aire en dirección contraria al flujo que trae el producto caliente que cae y avanza por gravedad.

El rolado de granos consiste en la gelatinización de las células de almidón complejas con la adición de temperatura y humedad, garantizando la ruptura del grano y la matriz de la proteína. Rompe la molécula del maíz lo que origina una mejor digestión del rumiante, con esto el proceso garantiza la digestión del almidón por parte de los animales quienes convierten los almidones insolubles a azúcares digeribles.

Como resultado de este proceso, el animal está en condiciones de procesar los azúcares, de una manera más rápida y eficiente cuando el producto llegue a su sistema digestivo, y este no sea desechado en los primeros estómagos del rumiante, ya que estas poseen un solo estómago que está dividido en cuatro cavidades o sub-estómagos, los cuales son el rumen, el retículo, el omaso y el abomaso, cada uno de estos compartimientos estomacales reciben otros nombres tales panza, redecilla, libro y estómago. Gracias a que el rolado u hojuelado ha mejorado la digestibilidad, traduciéndose en una mayor conversión entre la cantidad de alimento y una mayor ganancia de peso. Al tener el animal un mayor peso en menos tiempo, esto se ve reflejado en una ganancia económica, primero por alimentar al animal con menos kilos de alimento rolado, y que al tener los kilos ganados en menos tiempo, el animal pasa al siguiente proceso monetizar el proceso como lo habíamos descrito en párrafos anteriores.

En Meprosa somos especialistas para el diseño, construcción y puesta en marcha de sistemas de rolado de diferentes capacidades, dependiendo de la industria o mercados metas donde se encuentran nuestros clientes, la calidad del alimento que se logrará con grano rolado en muchas industrias como la cárnica y lechera  marca la diferencia entre la producción que se obtiene en cada negocio, ya sea producir carne o leche, estos volúmenes mejoran y se incrementan logrando obtener de una manera ms rápida puntos de equilibrio en la rentabilidad y productividad del negocio agropecuario en el que se desarrollan nuestros clientes.

Lograr una buena receta lo encuentras  dentro de los libros de cualquier veterinario certificado, pero lograr que esa receta tenga el máximo aprovechamiento de sus nutrientes y materias primas se logra con equipamiento y procesos bien definidos, diseñados y construidos por especialistas en la materia como lo somos en Meprosa. Agradecemos de antemano su confianza en nuestros equipos de trabajo para hacer de su proyecto una realidad.