Anteriormente, en el blog de Meprosa presentamos las características de algunos de los tipo de silo más comúnmente empleados. Para que nuestros visitantes conozcan más acerca de estos elementos de almacenamiento y logren elegir los que se adapten mejor a sus necesidades, en esta ocasión presentaremos otras opciones.
Cuando las necesidades de almacenamiento son de gran volumen lo recomendado es utilizar bunkers de grano, los que tienen forma de trinchera con muros de hormigón y una cubierta de lona hermética que sella la estructura a la perfección. Este tipo de silos es una alternativa bastante económica y, como hemos mencionado, permite almacenar grandes volúmenes de material. Por otra parte encontramos los de tipo bolsa, que se fabrican con tubos de plástico, por lo regular de un diámetro de 10 pies. Contrario a lo que se podría pensar porque están fabricados de plástico, no son estructuras livianas por lo que su instalación requiere de un manejo seguro. Los de tipo bolsa se encuentran disponibles en longitudes variables según el volumen del material que vaya a almacenar.
Otro tipo bastante común, principalmente para almacenar sal, arena y otros materiales secos son los cónicos. En este punto cabe mencionar que los diferentes tipos de depósitos de metal, madera u hormigón pueden tener un fondo cónico, o bien plano. En el caso de los que tienen el fondo cónico la descarga del material se hace por la fuerza de gravedad, mientras que para descargar los de fondo plano se tienen que usar transportadores de gusano o bien, recurrir a un proceso manual.
Es importante considerar que se deben seguir procedimientos de limpieza para conservar los contenedores en buen estado y evitar que los materiales que almacenan se dañen. Debido a las dimensiones y riesgos que implica la limpieza es necesario que se sigan pautas de seguridad para reducir los riesgos que las tareas de mantenimiento puedan suponer para el personal. Actualmente existen empresas especializadas en los servicios de limpieza de este tipo de estructuras, y aunque la manera más sencilla para limpiar silos es la introducción de un trabajador para que se encargue de la limpieza manual, también es la más riesgosa. Por ello, además de contratar una empresa especializada se recomienda que se utilicen métodos alternativos como los limpiadores acústicos o el sistema de limpieza Whip que consiste en el uso de una máquina de funcionamiento neumático que limpia el interior de los silos desde el exterior mediante aire comprimido.
En Meprosa, con una amplia experiencia en diseño de silo para granos contamos con numerosas opciones de la más alta calidad. Contáctennos para solicitar información detallada acerca de nuestros servicios, con gusto los atenderemos.