Factores que repercuten en la conservación y calidad del ensilaje

Silo de maíz precio

Usar el silo para producir ensilaje es una práctica cada vez más común en el sector ganadero, debido a que es un método de alimentación eficiente y permite suministros durante tiempos de sequía, sin embargo, producirlo no es una tarea sencilla. Es importante considerar los diversos factores que influyen en su conservación.

Tamaño del forraje picado

El tamaño de las partículas del forraje cosechado es un aspecto que repercute en el ensilaje, debido a que los picados finos favorecen la presencia de los carbohidratos fermentables y celulares del material, los cuales son indispensables para el medio microbiano y fermentativo. El forraje que es picado adecuadamente también vuelve más efectiva la compactación.

Los expertos sugieren varias dimensiones para producir ensilaje en silos para alimentar al ganado u otras aplicaciones, sin embargo, la mayoría concuerda que el tamaño de picado más conveniente es de aproximadamente 6 a 12 mm, aunque esta longitud varía según varios factores, como la estructura del depósito, la proporción del silo en la ración y el tipo de cultivo.

Pese a las diferencias, los expertos concuerdan en que los picados de tamaños grandes dificultan la compactación. Se trata de un problema serio, ya que deja una gran cantidad de oxígeno atrapado en el ensilaje, lo que produce aumentos de la temperatura y desperdicios de material valioso. Si bien el picado fino es recomendable, debe evitarse que sea demasiado fino, debido a que está asociado a varios trastornos en el ganado, como problemas en la rumia, baja salivación y acidosis.

Nivel de humedad y madurez del forraje

El contenido de materia seca en el ensilaje es el factor crucial para conservar de manera efectiva el forraje. Los excesos e insuficiencias son perjudiciales, por lo que es importante buscar la justa medida. Si hay niveles muy bajos de humedad, será muy complicado compactar el material ensilado de forma rápida, en cambio, si hay niveles demasiado altos de agua se obstaculizará el proceso de acidificación y fermentación de la masa, debido a que se diluyen los ácidos formados y extenderá el proceso fermentativo.

Si manejan forraje con alto contenido de materia seca (por ejemplo, granos con alto grado de dureza o cultivos pasados) es importante asegurarse que la picadora aplaste o quiebre el sorgo o maíz. Facilitan de esta manera la digestión del ensilaje a nivel ruminal. Es crucial también garantizar óptimos niveles de humedad. De esta manera, se obtendrá una excelente fermentación bacteriana, que facilite la exclusión del oxígeno contenido en el silo durante la confección.

Con respecto al contenido de humedad recomendado, debe ser de aproximadamente 55 a 65%. El forraje tendrá que picarse finamente en caso de que el contenido de humedad sea menor al rango mencionado. Se asegura así un empaquetado adecuado, para garantizar la extracción del aire. Si no se realiza, se oxidará una gran cantidad de azúcares, lo que derivará en daños causados por la generación de calor.

Sepan que el recalentamiento del ensilaje reduce el contenido de azúcares y la capacidad de digestión de las proteínas. La disminución lenta del pH en la masa dentro de los distintos tipos de silo que tienen alto contenido de humedad propicia la intervención de microorganismos indeseables en el proceso fermentativo. Algunos ejemplos son clostridium, las bacterias productoras de ácido butírico, entre otros.

Ensilar forrajes con exceso de humedad causa también pérdidas por lixiviación de proteínas, azúcares, proteínas solubles, entre otros elementos minerales. Es importante que cada cultivo madure adecuadamente para que el suministro tenga una óptima cantidad de azúcares para las bacterias en los silos. Maximiza también el valor nutritivo para alimentar al ganado. La madurez del forraje impacta considerablemente en la humedad de los cultivos que no se orean previamente, por ejemplo, el maíz.

Llenado, compactado y sellado

Es importante que el cultivo se cosecha y almacene en el silo lo más pronto posible. Si el llenado se prolonga ocurrirá una respiración excesiva, lo que deriva en altas pérdidas de la masa ensilada. Con respecto al compactado, tiene que efectuarse de inmediato cuando el material se deposite en silos horizontales.

Los expertos recomiendan empacar a densidades entre 520 a 820 kg/m3. Si la densidad del empaquetado incrementa, disminuirá considerablemente el pH y habrá pérdidas de materia seca. Es importante que la densidad se encuentre entre 414 y 525 kg/m3 si desean empacar forraje con alto nivel de humedad. De esta manera, evitan pérdidas causadas por filtración o por lavado.

Si desean preservar el ensilaje durante periodos muy largos y de forma adecuada, es importante aislarlo del ambiente atmosférico. Pueden lograrlo si aseguran la impermeabilidad de las paredes del depósito y colocando cubiertas si se deposita en un silo para granos horizontal. Comúnmente, las mayores pérdidas en este tipo de recipiente se presentan en las puntas, la parte superior y los costados contra los muros.

Extracción y suministro

El deterioro aeróbico se presenta cuando se realizan la apertura de los silos y en la fase de suministro. Esto se debe a que cambian diversos aspectos cuando el ensilaje se expone al aire ambiental, como la temperatura, el pH y la composición química. Resulta también afectada la cantidad y la calidad del forraje.

Comúnmente, el material adquiere un color blanco o se muestra descolorido cuando se deteriora. Presenta también una calidad deficiente y los animales pueden evitar su consumo debido a su mal aspecto. Puede contener también toxinas que provocan trastornos gástricos según la cantidad que ingiera el ganado.

Si consideran estos factores durante la producción y conservación del ensilaje, podrán percibir sus beneficios, entre los que destacan los siguientes:

  • Funciona como reserva en épocas de sequía. Pueden incluso conservarse por períodos de hasta 20 años.
  • Incrementa la productividad, debido a que aumenta las reservas de alimento.
  • Facilita el manejo de cultivos y forrajeras donde la cosecha de forraje vuelve sencillas otras prácticas de manejo.
  • Permite usar excedentes en la producción.
  • Proporciona nutrientes esenciales para el ganadero.
  • Garantiza el almacenaje de productos perecederos, lo que evita desperdicios.

Contacten a los expertos de Meprosa si desean el respaldo de expertos en la fabricación, venta e instalación del silo de maíz de precio asequible. Comuníquense al (668) 816 0150 si desean más información o visítennos en Blvd. Fco. Agraz Santana #1330 Nte., Col. Teresita, Los Mochis, Sinaloa.