Si usan o adquirirán una banda transportadora de precio competitivo, enfrentarán dos tipos de daños: daños inevitables derivados del funcionamiento normal del equipo y daños evitables. Por definición, los últimos pueden prevenirse y son causados por aspectos de diseño, contaminación, uso de tecnología inadecuada, entre otros. Afortunadamente, hay medidas para inhibir su aparición, que trataremos en esta nueva publicación.
Roturas por impacto
Usualmente, ocurren en la zona de carga del material. Al caer a cierta velocidad, el material transportado impacta en el recubrimiento superior de la banda, que no posee la capacidad de absorber el golpe por completo. Esto hará que el equipo presente rasgaduras, huecos o perforaciones espontáneas en la capa de revestimiento. En caso de que el golpe sea muy fuerte, la banda se desgarrará inmediatamente.
La solución a este daño evitable es operar sobre la misma transferencia, es decir, haciendo modificaciones en los planos inclinados de las descargas, de modo que se controle la velocidad de flujo de los materiales transportados. De esta manera, se controla la carga de los productos sobre la banda transportadora de precio competitivo y no se deja espacio libre para las caídas, aunque esto conlleva modificaciones relevantes en la estructura.
En muchos casos, se opera encima de la estructura de soporte de la banda en el área del impacto. Si se instala una cama de impacto, será posible absorber los golpes de los materiales que caen y amortiguar el contacto con la banda. Estas soluciones están conformadas por barras fabricadas con caucho, que es el material que absorbe la energía para minimizar la fuerza del impacto.
Daño por aprisionamiento
Las bandas transportadoras tienen efectividad comprobada en varias aplicaciones, aunque pueden sufrir daño por aprisionamiento, que destaca por los surcos en las laterales de la cinta del borde. Hay dos tipos daños por aprisionamiento:
- El primero se debe a la presión que generan las guarderas laterales. Al usar bandas usadas o cauchos duros como guarderas, se da un notorio deterioro en los puntos de contacto con la cinta.
- El segundo ocurre cuando el material queda retenido entre el sistema de guarderas y la banda transportadora. La solución para liberar los materiales retenidos es hacer que el chute o faldón cuente con una buena inclinación en el sentido operativo de la banda.
Cuando el material queda atrapado, ejerce presión sobre el equipo, causando un deterioro excesivo. Además del desgaste en la cobertura superior, pueden ocurrir derrames del producto bajo el área de carga.
Los expertos en la venta de cintas de transporte señalan que la principal causa de este daño prematura se debe al uso incorrecto de cintas viejas. El equipo transportador posee una dureza superior que el sistema de guarderas y es mayor la dureza de los tejidos internos. De hecho, las bandas viejas y usadas como guarderas se usan de canto y son sus tejidos los que tienen contacto con la cobertura superior del equipo, que tienen mayor dureza que esta última.
Banda desalineada y daños en los bordes
Cuando la banda se desalinea, es común que tenga contacto con su estructura. Si la cinta golpea contra la estructura, hará que los bordes se empiecen a desgastar o romper. Es importante aplicar el cuidado debido a la banda transportadora, de lo contrario, disminuirá el ancho de la cinta, lo que repercute negativamente en la capacidad de transporte del sistema.
Las cintas desalineadas se dan por varias causas y reconocerlas es indispensable para solucionar el problema. Entre ellas, destacan las cargas torcidas en la banda, estructura desalineada del transportador y acumulación de residuos en los rodillos.
Separación de las capas de la banda
Este daño puede notarse en los bordes de la banda transportadora de precio, entre tejidos o recubrimientos. Destaca porque las capas de la cinta se separan entre sí o por el desprendimiento del recubrimiento del sándwich de tejidos. Entre sus causas principales, destacan las dimensiones de los tambores de la estructura. Si poseen un diámetro muy chico, someterán a la cinta a fuertes procesos de tensión y compresión.
Sin embargo, el problema es más común cuando es baja la calidad de la cinta o cuando no hay óptimas condiciones en el entorno que afectan a la banda, como ataques químicos, altos niveles de humedad relativa, altas temperaturas, entre otros.
Deterioro en la capa superior
Este problema es notorio cuando hay una acción abrasiva excesiva, algo común en ciertas aplicaciones, como las de trituración. El material que resulta de tales procesos puede ser muy abrasivo, lo que aumenta las posibilidades de desgastar la cobertura superior de la cinta. En caso de que haya contaminación o un control deficiente del flujo del material, el desgaste en la cobertura superior será más notorio. En aquellas aplicaciones donde el desgaste es alto, conviene usar una cinta con una cobertura de grado W.
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