El silo para almacenamiento de granos es siempre indispensable en esta industria, sobre todo porque son construcciones que han sido diseñadas especialmente para almacenar productos a granel como pueden ser semillas, piensos, abonos o cualquier otro tipo de producto granulado que necesite estar en ausencia de humedad.
La idea de acopiar granos y semillas data al menos del siglo VIII a. C., lo cual fue posible atestiguar luego de que se encontraron algunos restos arqueológicos. En la antigua Roma se encuentran silos subterráneos, con recubrimientos de arcilla endurecida para obtener una mejor conservación de los productos que en ellos se almacenaba.
Los silos en la era moderna
El silo para granos de la era moderna data del siglo XVII d. C. y estaban construidos con madera y con una cubierta de zinc, paja o tela, dependiendo de las necesidades de los agricultores de aquella época, en la que se comenzaron a construir los silos para grano elevados, es decir, tal y como los conocemos en la actualidad, ello con el fin de alejar los granos de los animales y así evitar que se los comieran.
Gracias a los avances tecnológicos de la época, los silos de grano varían en la actualidad según las necesidades que cada una de las industrias tengan. En este sentido, los silos pueden tener formas rectangulares, cuadradas o cilíndricas. En el caso de los silos para grano, es mejor utilizar los cilíndricos, los cuales, por cierto, deben ser colocados en zonas alejadas de paredes y árboles, para evitar que los insectos y roedores se acerquen a ellos y los contaminen.
¿Dónde adquirir silos?
Sin duda, los silos para el almacenamiento de granos son muy importantes, así que, si ustedes desean adquirir este tipo de productos, lo mejor será que se acerquen con una empresa especializada como Meprosa, donde contamos con productos de excelente calidad, así como con la experiencia suficiente para lograr satisfacer las necesidades de todos y cada uno de nuestros clientes.