Silo para granos: una solución efectiva ante el aumento de población

Silo de maíz precio

En los inicios de la humanidad, la población total en el mundo no era demasiada, la cuota alimentaria que cada clan y tribu generaba era suficiente para abastecer a todos los hombres, mujeres y niños que allí vivían; no obstante, la supremacía del hombre frente a la naturaleza y su deseo de conquistar nuevos terrenos más allá de su imaginación, llevaron a que el número de personas aumenta año tras año.

La tasa de natalidad era mucho mayor que la de mortandad, lo que obligaba a la tierra a producir más alimento para que todos pudieran sobrevivir y subsistir apropiadamente; no obstante, la tierra cultivable no se puede explotar de esa manera y se generaba un desequilibrio entre lo que se debía producir y lo que se cosechaba; además, en épocas de sequía o invierno, donde el cultivo disminuye, se hacía mucho más precaria la situación.

Por esta razón, desde las civilizaciones más antiguas, como la romana, que se encontraban en un amplio proceso de expansión, inventaron una especie de silo para granos que consistían en agujeros en la tierra recubiertos de arcilla que se utilizaban para almacenar en las épocas no cultivables el alimento, y de esta forma, suplir la necesidad de comida que se tenía al rotar entre reserva y cosecha simultáneamente y evitando que las personas muriesen de hambre.

Esta tendencia se expandió alrededor del mundo y en la época feudal era una práctica común la de generar o construir silos donde se pudiera almacenar una reserva de alimento, conservarla lo mejor posible y distribuirla cuando no se pudiera cosechar, y no fue sino hasta el año 1873 en Estados Unidos donde se construyó en madera el primer espacio de almacenaje compacto y especializado para almacenar la comida.

Año tras año se multiplicaba la población mundial, y con esto, la expansión de la idea de almacenar el grano, alimento duradero ante condiciones climáticas y espaciales concretas, en el silo de maíz precio, generando incluso una práctica común entre los agricultores y un elemento esencial en el cultivo y preservación del alimento.

En esta ocasión, Meprosa le contará todas las maneras como el silo para granos hace frente al aumento constante de la población, que, tan sólo en México, aumentó aproximadamente 13 millones de personas en tan sólo una década, lo que obliga a que casi todas las industrias productoras de alimento tengan estas estructuras; al final del artículo les contaremos una manera fácil de adquirirlos para su industria.

Procesos automatizados

La nueva tendencia del momento es automatizar absolutamente todas las tareas operativas que se deban realizar en el día a día; en el caso del almacenaje de alimentos, se cuenta con una notable manera de automatizar: en primer lugar, la cosecha realizada se puede distribuir a través de bandas transportadoras (comercializadas también en Meprosa), en donde el producto atraviese automáticamente por todas las etapas de preparación y supervisión, por lo que no se requerirá de maquinaría o personal que cargue el producto de un lugar a otro.

Ya dentro del silo para granos se debe buscar que el producto no reciba la presencia de ningún agente externo, sea aire, animales, bacterias, agua o diferentes agentes externos, por lo que esta estructura debe ser completamente hermética al exterior; además, se requiere manejar ciertos niveles de temperatura y humedad, algo de lo que los agrónomos no deberán preocuparse, pues esto lo realiza un proceso automatizado.

Almacenamiento eficiente

Si usted aún cree que guardar el alimento en cualquier lugar ya podría reemplazar estas estructuras, permítanos decirle que se equivoca, ya que guardar en este espacio es considerablemente mejor, en primer lugar por su capacidad, ya que puede aguardar desde diez, hasta 27,000 toneladas de grano, por lo que si se encuentra en este rango no tendrá mayor complicación en el espacio a ocupar.

En segunda medida, los silo para granos poseen una estructura interna diseñada específicamente para almacenar cada tipo de grano en condiciones estables y manteniendo un orden específico que ayude a disminuir los procesos logísticos, al usted estar en la capacidad de encontrar exactamente el lote de granos que distribuirá a cada parte del país o incluso del planeta, asegurando una cadena de conservación que facilite la obtención de ganancias.

Protección

Cada grano perdido, cada tonelada que sucumbe ante la descomposición no sólo representa una pérdida económica, significa que al menos una persona en el mundo se quedará sin alimento y tendrá una amplia probabilidad de morir de hambre, salvaguardar la comida para que todos tengan la oportunidad de comer es fundamental.

Por eso, estas estructuras se diseñaron con los materiales más fuertes para que, ni ante el poder de una tormenta, permitan que el viento, el agua, los animales, las bacterias, el sol, la humedad, la sequía, entre otros entren y contaminen los alimentos, algo que haría que uno o millones de granos se perdieran y alterarán ese delicado equilibrio entre la saciedad y la hambruna.

Si quiere esto para su industria, no dude en llamar a Meprosa, especialistas en la construcción del silo para granos adaptado a sus necesidades, contáctenos al (52) 668 816 0150 o escribanos en el correo electrónico ventas@ralr10.sg-host.com para recibir más información de nuestros productos y sus precios.