En comparación con otros sistemas de almacenamiento, el silo de metal destaca por su resistencia, durabilidad y hermeticidad. También es la mejor opción para almacenar granos, no obstante, es importante seguir una serie de pasos para garantizar un almacenaje exitoso.
Paso uno
Deben secarse y limpiarse los granos de forma adecuada antes de depositarlos en los silos de metal, que es el material más conveniente. Esta actividad puede realizarse mientras los silos son preparados. Antes de proceder al llenado, deben acondicionar los granos para que adquieran la temperatura del ambiente. Si los usuarios, por experiencia, consideran que los granos están secos y listos para ensilarse, deben permanecer tres días más en el exterior.
Paso dos
Los silos metálicos son la opción por excelencia para almacenar granos, además su interior y exterior deben limpiarse con un paño húmedo y secarse de inmediato. También debe revisarse la presencia de agujeros. Es importante reparar todos los daños causados por usarlos, como hoyos, corrosión en las láminas, quiebres de soldadura, entre otros. Para solucionarlos, deben aplicarse técnicas adecuadas de soldadura, pintado y lijado.
Paso tres
Los silos deben colocarse sobre una tarima o plataforma plana para evitar que se oxiden por contacto directo con el suelo.
Paso cuatro
También deben ubicarse bajo un techo para evitar los daños por precipitaciones pluviales o radiación solar. De esta manera, se prevendrán también la condensación o sudor en su interior. El problema con la condensación es la generación de agua que daña el grano, debido a la proliferación de hongos y bacterias indeseables.
Paso cinco
Todo silo debe llenarse con grano limpio y seco con menos del 14% de humedad. Si la humedad contenida es alta, el grano se dañará, ya sea por calor excesivo o proliferación de hongos, lo que puede arruinar todo el producto.
Paso seis
La fumigación es importante y debe realizarse con pastillas de fosfamina. Debe usarse una pastilla por cada cinco quintales de la capacidad de los silos y, posteriormente, sellar las aberturas al menos diez días. El sellado puede hacerse con cinta adhesiva, grasa, cebo o cera.
Paso siete
Tras dos horas de colocar las pastillas de fosfamina, los usuarios deben revisar si no hay fugas en los silos. Percibir olor a ajo es una manera de detectar escapes. En caso de hallarlos, tienen que taparse las zonas defectuosas con jabón o cera, aunque es preferible llamar a los fabricantes para repararlos.
Paso ocho
Es importante sellar cada silo durante diez días y no abrirlo, de esta manera, se garantiza la efectividad de la fumigación. Los granos podrán consumirse hasta seis días después de terminar la fumigación. En caso de no usar o consumir los granos, los propietarios deben revisar cada mes su estado y sellar los silos nuevamente. También deben fumigar si se detectan insectos vivos.
Paso nueve
No deben colocarse objetos encima de los silos, además tiene que evitarse el contacto con productos que oxiden las láminas, como radiación solar, fertilizantes, entre otros.
Paso diez
El vaciado de los últimos quintales no debe efectuarse mediante la inclinación de los silos. En su lugar, se recomienda usar una regla que tenga otra regla cruzada en una de las puntas (forma T). Tras vaciarlo, deben seguir los pasos enlistados antes de usar nuevamente los silos.
Ventajas de los silos metálicos para almacenar grano
Los silos de metal son más ventajosos que los de hormigón o plástico en el almacenaje de granos. Pueden confeccionarse en cualquier sitio con láminas lisas de zinc, además las herramientas pesan poco y pueden transportarse en bolsas ligeras, lo que es ventajoso para los fabricantes. Si cada silo para granos es cuidado adecuadamente, no proliferarán hongos, insectos, aves y roedores, además disminuye considerablemente las pérdidas en comparación con otros sistemas de almacenamiento.
En su interior pueden conservarse los granos por mucho tiempo sin pérdidas físicas que vulneren la seguridad alimentaria de los productores. Con respecto a la fumigación es muy sencilla y pueden almacenarse granos hasta que se eleven los precios del mercado, lo que proporciona ventajas económicas.
Los costos de los silos metálicos se pagan por sí solos mediante la disminución del nivel de pérdidas, además ocupa poco espacio, es liviano y fácil de mover. Sus materiales constructivos se adquieren fácilmente y pueden durar más de 20 años si se cuidan adecuadamente. Cabe agregar que es una estructura excelente para los pequeños productores.
Si desean un silo de maíz de precio accesible y de alta calidad, contacten a los expertos de Meprosa a través del número (668) 816 0150 o completen el formulario disponible en nuestro sitio web.